Nuestro encuentro estuvo guiado por estudiantes de la especialización que tomaron el rol de presentadores y presentadoras. Al inicio del evento, explicaron el origen del ADN a través de una breve interpretación teatral y, durante toda la jornada, divirtieron al público con preguntas sobre química, chistes temáticos y tandas de baile.
El conocimiento científico y las expresiones artísticas atravesaron toda la celebración, cuyo objetivo fue representar de una forma entretenida la estructura y función del ADN. “Me parece muy bueno mostrar que podemos agarrar algo de estudio y divertirnos”, dijo Micaela -organizadora y alumna de 5to. año.-.
La kermesse con stands interactivos fue una de las propuestas principales en donde realizamos múltiples actividades: experimentamos en vivo extrayendo y visualizando el ADN de una banana; armamos cadenas de ADN en forma de creativas piezas de origami; proyectamos un documental histórico y desafiamos a los y las visitantes a poner a prueba su conocimiento con preguntas por puntaje.
Asimismo, impactamos a la audiencia con un sorprendente ADN gigante, que construimos con botellas de plástico. También jugamos a ser fragmentos de ADN en el stand de electroforesis, espacio que nos propuso participar de una carrera de obstáculos agarrándonos de las manos y pasando de un lado a otro en el menor tiempo posible.
Además, sacamos nuestro lado instagramero para crear momentos fotográficos únicos; mientras que en el stand de maquillaje nos pintamos coloridos y brillantes dibujos sobre el ADN, para lucir con orgullo en la celebración.
Por otro lado, los chicos y chicas de 4to. año expusieron un novedoso trabajo que consistió en tomar la letra de una canción, convertirla mediante herramientas bioinformáticas en una proteína y compararla con alguna proteína ya existente, registrada en la base de datos internacional de proteínas conocidas. Al finalizar sus presentaciones recibieron diplomas de felicitación y un premio al grupo más destacado. Nicolás, uno de los ganadores, nos contó: “En nuestro caso, elegimos la canción Saoko de Rosalía y nos tocó la tiroglobulina, una glucoproteína que se encuentra en la tiroides. Es un proyecto buenísimo y me encantó poder investigar sobre este tema”.
Recordar el fundamental aporte de Rosalind Franklin al descubrimiento del ADN y visibilizar cómo su papel pasó desapercibido en la historia, en una época donde los hombres tenían el monopolio de la ciencia, fue uno de los ejes centrales de este día. Desde ese lugar, fue muy enriquecedor recibir y dialogar con la Dra. Valeria Levi, Química e investigadora principal del CONICET, quien nos contó cómo es su trabajo en el laboratorio y nos dio su opinión sobre la desigualdad de género en este campo: “Cada vez más mujeres científicas estamos dispuestas a interpelar a nuestros pares varones y facilitar el camino para ustedes, que son las que vienen”, transmitió nuestra invitada, motivando a las chicas de ORT a estudiar esta disciplina y seguir apostando por la inclusión.
En relación a las mujeres y la ciencia, dialogando con Paula -estudiante de 5to. año- sobre su futuro profesional, nos contó: “Creo que en algún momento voy a querer estudiar algo que tenga que ver con la química y el conocimiento científico. Fue muy importante la charla que nos dieron sobre el reconocimiento del género femenino en la ciencia, porque actualmente siguen habiendo algunas distinciones que tendríamos que intentar cambiar”.
Por último, una banda musical compuesta por estudiantes de Química y Biotecnología interpretó las canciones Hey Jude y Party for the USA, con letras reversionadas de manera muy original y dedicadas especialmente al homenajeado del día: el ADN.
¡Felicitamos a todos los alumnos y alumnas por preparar este evento con tanta dedicación!