En Israel, meses antes de la llegada del festival de Lag B’Omer –el día 33 del Omer, los 49 días que hay entre Pesaj y Shavuot— uno puede ver a niños y adolescentes llevando a las rastras todo tipo de combustibles, desde árboles caídos a sillas rotas y colchones viejos. ¿Su destino? El terreno baldío más cercano, en donde apilan sus “atesoradas posesiones” hasta alturas imposibles y esperan con mucha ansiedad hasta la noche de Lag B’Omer, muy posiblemente su noche favorita del año, en la que convierten estas pilas de desechos en enormes fogatas.
Día de la Independencia de Medinat Israel lograda el 14 de mayo de 1948. Se festeja el 5 de iyar del calendario judío, fecha en la cual David Ben-Gurión declaró el fin del Mandato Británico y la creación del Estado de Israel. Siempre es precedida por Iom Hazikarón, Día del recuerdo de los soldados muertos de Israel y de las víctimas del terrorismo, conmemorándose el 4 de Iyar.
El 27 de Nisán, (28 de abril, comenzando el 27 de abril de 2022) se conmemora el Día del Holocausto en la Diáspora. La fecha es para recordar a aquellos que decidieron sus vidas realizando un levantamiento en el Ghetto de Varsovia. Su heroísmo representa a los 6 millones de judíos que fueron brutalmente asesinados por los nazis. Este día recordamos no sólo a los masacrados sino también a todos aquellos que colaboraron a salvar tan solo una vida. Ellos fueron los "Justos entre las naciones". Hoy recordamos, no olvidados. "El deber del superviviente es dar testimonio de lo que ocurrió, hay que advertir a la gente de que estas cosas pueden suceder, que el mal puede desencadenarse- Elie Wiesel
“Y habló el Eterno a Moshé diciendo: El décimo día de este séptimo mes es Iom Hakipurim, habrá convocación sagrada para vosotros y afligiréis vuestras almas… Ninguna labor haréis en ese mismo día, porque es el día de Iom Hakipurim… Shabat Shabaton es él para vosotros y afligiréis vuestras almas, el nueve del mes por la tarde, de tarde a tarde…” Vaikrá, Levítico, XXIII: 26-32
“En los largos años que ocupó el exilio en la historia, Tishá Beav se transformó en una fecha en la que los judíos conmemoraron no sólo la destrucción de los dos Templos en el lejano pasado, sino que agregaron a ese significado la realidad de un presente de continuos períodos de vida como pueblo exiliado de su Tierra, disperso entre otros pueblos, esclavo de ellos, y falto de elementos de independencia y libertad” Yeshaiahu Leibowitz, Conversaciones sobre las festividades y conmemoraciones de Israel, 1999.